- Hombres como este guardameta norirlandés demuestran que en el fútbol más antiguo se jugaba con la valentía y el pundonor por bandera. William Norman McCourt Uprichard no era un hombre alto como para defender el arco, pues medía 1´75, sin embargo tenía otras características por las que muchos historiadores le recordamos.
Llegó a pertenecer al Arsenal, donde nunca tuvo sitio, aunque posteriormente brilló en equipos como el Swindon Town, Portsmouth o Southend United, clubes para los que jugó a lo largo de su carrera, además de otros.
Fue internacional para Irlanda del Norte en dieciocho ocasiones, ejerciendo como meta reserva de su compañero y amigo Harry Gregg, quien acaparó toda la atención bajo palos en la primera Copa del Mundo que afrontó su país, la de Suecia 1958. Sin embargo tuvo la opción de jugar un partido.
En su juventud practicaba fútbol gaélico, disciplina en la que también destacaba este portero nacido el 20 de abril de 1928 en Moyraverty, Lurgan (Irlanda del Norte). Uprichard combinó ambas aficiones durante su juventud, hasta que se decantó por el balompié.
Daría sus primeros pasos como futbolista en el equipo de su ciudad, el Glenavon. Allí demostraría que el "deporte rey" no solo era cosa de hombres corpulentos, pues a él no le faltaban condiciones para defender la portería. Muchos relatan anécdotas sobre él, y todos coinciden en que era un tipo con agallas, un habilidoso guardián del gol.
Con el conjunto de Lurgan se daría a conocer, de donde pasó al Distillery, otro club norirlandés con el que lograría llamar la atención de la directiva del Arsenal tras haber disputado sus primeros partidos como profesional.
Abandonó aquella entidad con sede en Belfast para viajar a Inglaterra y así fichar por la empresa londinense en junio de 1948, la que contaría con los servicios del menudo irlandés a cambio de 1.500 libras esterlinas.
Uprichard nunca llegaría a debutar para el Arsenal, puesto que otras opciones para la portería eran hombres experimentados como George Swindin, Ted Platt y el galés Jack Kelsey. Ellos fueron quienes impidieron el debut como "Gunner" del que algunos apodaban como "Black Jake".
Norman no tendría ninguna opción y acabaría abandonando Highbury para fichar por el Swindon Town, al que llegó tras ser abonadas en Londres las 750 libras que permitieron su fichaje por la entidad de County Ground.
Supo resarcirse de aquel varapalo con el Arsenal llegando a cuajar grandes actuaciones con su nuevo club, aquel que representaría durante tres campañas participando en más de setenta partidos en la liga inglesa.
Una vez finalizada la temporada 1951\52, Norman Uprichard se incorporaría al Portsmouth, donde también sabría dejar constancia de su buen hacer antes de partir a Suecia para afrontar su primer y único Mundial de fútbol.
En siete temporadas cumplidas con el equipo de Hampshire, Uprichard jugaría 182 partidos antes de unirse al Southend United. Con este compitió en la tercera división inglesa en lo que supondría sus años finales, esos últimos partidos que con cumpliría en la empresa de Essex, ya que aguantaría jugando al fútbol un poco más.
Pese a su corta estatura, Norman Uprichard demostró ser un magnífico guardameta. |
- Sus últimos equipos fueron el Hastings United y Ramsgate Athletic, para colgar los guantes después y regentar algunos negocios, como por ejemplo, un pub en Belfast. Norman Murió en Brighton el 31 de enero de 2011.
Para la selección de Irlanda del Norte jugaría dieciocho partidos, uno de ellos sería en la única Copa del Mundo a la que pudo asistir. Sería en Suecia 1958, en la que la lesión de su compañero Gregg le permitiría jugar -también lesionado- en aquel milagroso partido ante Checoslovaquia que le haría pasar a cuartos a su equipo tras imponerse por 2-1. Por desgracia, y sin Uprichard en la portería, la selección norirlandesa caería eliminada ante Francia por 4-0.
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