¿Te acuerdas de Jimmy Nicholl?

- Son muchos los casos de oriundos británicos cuyas vidas se han forjado en Norteamérica. El de James Michael Nicholl es uno de ellos, hijo de emigrantes norirlandeses que se instalaron en Canadá antes de que él naciera el 28 de diciembre de 1956 en Hamilton (Ontario).

Perfectamente pudo representar a la selección canadiense en el Mundial de 1986, sin embargo, este mítico defensor prefirió guiarse por sus raíces británicas para defender la bandera de Irlanda del Norte, para la que ya había jugado en España 82.
También tiene una extensa trayectoria como jugador de club, aunque una parte de ella la desarrolló en tierras americanas y el resto en Inglaterra y Escocia, defendiendo los escudos de equipos como el Dundee, West Bromwich Albion, Sunderland o Rangers, entre otros.

Tenía tres años cuando su familia decidió retornar a Irlanda del Norte. A las afueras de Belfast se crió, en una pequeña localidad llamada Rathcoole. Fue una propuesta del Manchester United lo que hizo que Nicholl se trasladase a Inglaterra.

Allá se fue con su familia para crecer en las categorías inferiores del club de Old Trafford. A partir de mediados de los setenta participaría en sus primeros partidos oficiales con los "Reds", con los que en 1977 ya ganaría la FA Cup.
Fue el único título que pudo ganar con el Manchester, un club para el que jugó durante casi seis años completando unos registros de 197 partidos y 3 goles. Ya fuera del club, Jimmy iniciaría un largo vagar por varios clubes de fútbol y de distintos lugares.

Tras participar en el Mundial de España, Nicholl se fue al Sunderland, de donde se marcharía a su Canadá natal para probar fortuna en el Toronto Blizzard, cuando aún ni existía la Major League Soccer.

En 1983 se plantó en Escocia para fichar por los Rangers de Glasgow, donde el norirlandés quiso demostrar que era un defensa de grandes condiciones, internacional, y valedero para ocupar varias posiciones defensivas, aunque normalmente se desempeñaba como lateral derecho.
Dio sus primeros pasos en la competición escocesa con el Rangers, para el que solamente jugaría una temporada cumpliendo como central o lateral defensivo, participando en 17 partidos antes de marcharse.

Pero Jimmy no se iría para siempre de Ibrox, ya que solamente saldría de Glasgow para volver a competir una vez más en la primera división inglesa con el West Bromwich Albion, donde estuvo dos años.

Volvió al Rangers para vivir una segunda etapa, mucho mejor que la primera, desde luego. En su retorno al equipo de Ibrox, Nicholl sería un jugador clave participando en 58 partidos de la Premier escocesa.
Sumó varios títulos en su retorno al equipo azul. Además de la Scottiish League Cup, que ya había ganado anteriormente, el defensa norirlandés añadiría otros dos ejemplares más y dos títulos de Liga, hasta que a finales de los ochenta se desvinculó del club para continuar con su trayectoria deportiva.

Con el combinado norirlandés, Jimmy Nicholl participó en dos Copas del Mundo.

- Su siguiente destino sería el Dunfermline Athletic, también de la Premier escocesa. De ahí pasaría al Raith Rovers, y finalmente al humilde Bath City, con el que concluiría su carrera a mediados de los noventa. Actualmente le identificamos por su trabajo en los banquillos, en los que ejerció como director o asistente técnico.

A mediados de los setenta comenzó a jugar sus primeros partidos internacionales, asistiendo ya como titular del conjunto norirlandés en el Mundial de España 82 y posteriormente en México 86. En total, Nicholl disputó 73 partidos y dejó un gol.